miércoles, 18 de julio de 2012

Todo lleno de mar.





Le hubiera gustado fotografiarlo para no tener que contarlo incompleto pero los momentos inesperados no pueden ser retratados.

Todo fue confuso, realmente confuso. Solo recuerda la oscuridad, el sonido de las olas, el carbón en los pies, el mareo de 4 cervezas, la brisa caliente en el pelo, un "la nada es la ausencia de luz", el susurro de una caja vallenata a lo lejos, los ojos fijos en el faro y de repente una boca sobre su boca.

Ahí empezó todo... ¿Todo qué?... Todo, lo que piensa, lo que hace, lo que ve, lo que dice, lo que viste, lo que se quita, lo que grita, lo que lee, lo que pisa, lo que abraza, lo que duerme, lo que compra, lo que espera y lo que ha dejado de esperar... Todo.

Hay historias que se dejan atrás y se olvidan después de haber vivido en el mar. Esa gran extensión de agua tiene el don de lavar mentes, erradicar la rabia, alejar el rencor, desempolvar los buenos pensamientos y finalmente dejar que te enredes con el que te besa en la playa. Con el primero que te endulza el oído, te sube el ego y además pisa la arena contigo, con ese el mar te deja ir, así, como si fuera este el último, como si fuera este el primero.

Bienvenida al amor y el desamor una vez más, a la alegría y la tristeza, a la desazón y el orgullo... Obvio ya lo había vivido antes pero la diferencia ahora es que lo vive con el de la playa y de paso se siente terriblemente feliz.



jueves, 8 de septiembre de 2011


Ha sufrido un corto intento de llorar... Casi se le sale la lágrima leyendo una entrada anterior, pero, ahora ve, puede ser más fuerte que esa nostalgia dolorosa que produce un recuerdo.

Últimamente come menos, a veces come más, a veces se desespera y habla duro o escribe gritos en hojas blancas. A veces se echa el queso derretido encima y otras veces llega muy temprano a clase, pero lo mejor es que ahora sufre menos, ya no se preocupa, solo sufre porque sube de peso.

Ella mueve los dedos con más calma, ya no revisa cada uno de sus movimientos, se ha vuelto a sentir sexy, se ha vuelto a querer un poco, ya no se humilla ante él, ya no le grita groserías a nadie, ya no llora a diario... Ya no está con él, ya no piensa en él, ya no tiene heridas que tocar, solo heridas que olvidar.

Ahora tiene amigos íntimos, disfruta de los momentos, sale más seguido, habla con más gente, se demora más en la universidad... Ahora está a punto de volver a ser la de antes.

sábado, 6 de agosto de 2011

Finalidad.


Ya van dos meses de fuerza de voluntad... ¿Se han dado cuenta hace cuánto no escribía? Se siente una descarga, como si ya no hubiera de qué preocuparse.


Todos los lazos se rompieron, aún me pican las manos y me dan ganas de morderle los hombros y a veces halarle el pelo pero el rencor y el dolor que siento con sólo acordarme de todo lo que lloré, de todo lo que sufrí por conservar ese algo que me mortificó siempre, que solo me trajo problemas, que me hizo subir y bajar de peso radicalmente, que me hizo aprender más groserías, que me hizo perder fuerzas en algo que solo yo estaba empujando, es más grande, es lo que me frena a coger el teléfono y marcar y pedir perdón por n-ésima vez, porque siempre lo hice yo y solo la mitad de las veces de verdad reconozco que me equivoqué, y que va, ni siquiera, ahora no me arrepiento de las veces que él se estremeció y se preocupó por esto, porque además de que fueron mínimas veces no fue suficiente para que él sintiera lo que yo sentí, lo maltratada que fui, lo realmente adolorida y cansada que me dejó todo esto.

Ahora escucho Café Tacuba tranquilamente, voy a Unicentro buscándolo entre la gente pero rogando que no me lo encuentre porque no quisiera que él viera cómo lo ignoro, como sencillamente le mando una sonrisa ladeada. Salgo con el que yo quiero, ya no pienso en una fidelidad utópica, irreal.

"Mocos debajo de la mesa" me parece haber escuchado eso antes, en algún lado, como si yo lo hubiera escrito.

jueves, 25 de noviembre de 2010

Gorda.


Ella conversaba con todos y sonreía, movía el dedo índice recostado en su codo opuesto, se distraía y dejaba de sonreír... Decía que sí, movía la cabeza de arriba a abajo de manera muy suave... Se quitaba la chaqueta mientras pronunciaba
el típico "No es cierto, no digas esas cosas"... La sombrilla de él era movida por el viento. La lluvia seguía en el mismo sitio. Se le movía el estómago. Sus dedos olían feo. Se comía un caramelo relleno de coco. Mordía el coco y luego lo olvidaba; quedaban trozos en sus dientes. Las vacaciones la afectaban, comenzaba a engordar, a sentirse gorda. No quería ir al psiquiatra y entonces ahora hacía todo lo posible por no llegar a tiempo, por no llegar. Se sentiría irresponsable y luego iría a su casa a tomar dos, tres pastillas más.


viernes, 30 de julio de 2010

Me duele la cabeza... Mírame bien, te necesito igual en algo tan pequeño como ver el día pasar... Julieta Venegas me canta mientras espero a Leidy Díaz que viene en el Museo del Oro.

Te vas, en algún momento muy cercano te vas, mañana? pasado mañana? la otra semana? Mejor que no me lo digas, de pronto puedo tolerar la idea de que te fuiste ya, y listo, te llamo, me llamas, nos saludamos y colgamos. Así es la vida, 3 años luchando por ti, casi 4!! y de repente te vas, con una partida muy anteriormente anunciada... Te extrañaré, eso es todo lo que puedo decir. Me quedaron muchas veces para invitarte a almorzar, y nunca fuimos a comer leche asada, y no vimos ninguna película romántica, ni nos fuimos de viaje terriblemente lejos, ni tuvimos más gatos, ni te volví a ver ebrio... Esta historia se acabó al parecer, o entró en stand by... Posiblemente no vuelva a sufrir por ti un largo tiempo, o tal vez nunca más... Como tu dijiste 3 veces ayer: Así es la vida.

No me diste tiempo para adelgazar más, ni para crecer un poco más, ni para nadar mejor, no me diste para ser mucho más inteligente... Se acabó el tiempo y no me alcanzó para hacerte ver que conmigo sí se podía, que era solo un pequeño conflicto el que habíamos tenido, que las cosas se podían arreglar y todo iba a ser mejor... No me dio tiempo el tiempo para convencerte de casarte conmigo algún día, ni de pedirme que te esperara...

Así es la vida, y mientras tu coges la derecha, yo voy a la izquierda en este camino de la vida, donde no te esperaré y tal vez no me case contigo, pero si es cierto que la vida da vueltas nos volveremos a encontrar y no solo para seguir siendo amigos sino para volver a construir nuestra historia.

Te extrañaré... y tu a mi cada vez que veas tu maleta y una que otra estrella de mar....

lunes, 18 de enero de 2010

Dos años después


Después de todo las cosas siguen igual.


Hoy vuelvo a escribir por la misma razón, porque la duda no me deja ver, y es aquí y ahora cuando se me ocurre que escribir es la única manera de ensordecer al público mientras yo lloro y me reviento entre las lágrimas.


He pensado muy detenidamente que tal vez tu y yo deberíamos compartir solo una vez al mes. Y esa vez entonces nos reuniríamos a tomar chocolate con queso en algún café de esos a los que nunca quisiste ir. Y así, yo me sentaría a esperarte cada día específico de cada mes a pensar solo en ti, a pensar por qué no has llegado, por qué no has llamado, por qué otra vez, como cada mes, no vas a llegar. Y entonces, mi cabeza estaría dispuesta a pensarte solo una vez al mes y no nos haríamos tanto daño.


Hasta hoy pensaba que era única en tu vida, que ya habiamos superado los momentos de inseguridad que solían invadirme para empezar a confiar en ti con los ojos totalmente cerrados mientras tu me decias que me necesitabas y que lo mejor era no abandonarnos. Antes de esto yo buscaba salidas, buscaba otras personas, hasta encontré a alguien que pudo haber sido diferente, pero lo obligué a que fuera igual qa ti y nada se pudo hacer. Antes quería otra manera, queria definitivamente hacerte a un lado y no sabes todo lo que logré para que tu volvieras y me dijeras que estaba equivocada y vovler a creerte y devolverme al principio!!!


Me estoy cansando de ser tu trencito, que me devuelvas al principio de la ruta cuando se te da la gana y que me acerques y me abraces solamente cuando no estoy averiada.


Yo no sé cómo tienes tanta fuerza para hacerme sentir vulgar e inútil, para hacerme sentir que no es tan importante lo que he dado por ti, lo que te ofrezco a diario, lo que te digo... A veces creo que el hecho de que te pase los dedos por cada una de las arrugas de tu cara no es suficiente para mostrarte que de verdad te estoy dando mi vida!!


La próxima vez el que tiene que pensar las cosas eres tú, porque desde hace más de dos años me estas perdiendo y el errore era confiar en ti, pero ahora la cosa está más grave, porque ya hasta la confianza se esta desvaneciendo.


Lo que tienes que hacer esa próxima vez, es llamarme a mi primero, y no a ella...



miércoles, 24 de diciembre de 2008

Navidad de mierd....

Hoy se llegó otra navidad y no me queda más oficio que recordar la pasada....
Todo hoy me entristece.... Todo tiempo pasado fue mejor.... Estoy una navidad menos joven.

... ya no me imagino...

El gato, las sábanas, el sobrino, la tía, la marihuana, el "te amo" de media noche"... todo hace falta. Ya con 18 años no se puede sobrevivir. Empiezo a entender a Andrés Caicedo... carajo! sobrevivió hasta los 25!!!

Bueno, voy a empezar a ser sincera: No estoy sola, me acompaña mi mamá, mi papá y mi hermano mayor. Ellos me abrazarán esta noche. Todos preparan la cena. Todos veremos una película. No hay confusion, solo ganas de olvido. No hay necesidad, solo intento de olvidar. Ya no me tienes, ya no te tengo.... pero hay navidad.

Ojalá hoy uses tus medias de vaca, y escuches algo de musica en tu mp4 mientras degustas un poco de ajiaco jajaja.